domingo, 25 de septiembre de 2011

Machetes camperos

Hola amigos,

os enseño tres de mis joyas (no por su calidad, sino por el valor sentimental). La primera pieza la compré allá por el año 1991 en el norte de Tailandia, es vieja y muy trabajada, pero tiene una hoja finita como una cuchilla. La segunda pieza la compré en Malasia al año siguiente en un tallercito de fragua, y es un poco pesada, pero con ese bicharraco en cortado un tronco de 15 centímetros en unos pocos golpes. Y la tercera pieza, es un machete brasileño adquirido por cuatro perras, y la verdad es que tiene la hoja un poco doblada, pero para cortar hojarasca está bien (con este no cortais un tronco ni de coña, está fabricado para lo que es, matojo brasileiro y poco más).